VESTIMENTA: ¿CON QUÉ ROPA?

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Vestimenta: ¿Cuál es la ropa que el Señor aprueba?

Queridas hermanas, paz y gracia del Señor Jesús.

En este punto me gustaría entrar en un tema que trae cierta controversia en el mundo cristiano, especialmente para las mujeres jóvenes y las convertidas recientemente. ¿Qué ropa aprueba el Señor?

Bueno, para responder a esta pregunta tendremos que comprobar lo que dice la palabra de Dios sobre este tema. En Deuteronomio 22: 5 la Biblia nos dice que “la mujer no usará ropa de hombre, ni el hombre usará ropa propia de mujeres; porque cualquiera que hace estas cosas es abominación al Señor tu Dios”. Resumiendo el versículo anterior, según la palabra de Dios, la mujer no debe usar pantalones, ropa propia del hombre, ni el hombre falda o vestido, ropa inherente a la mujer. Pero podrías pensar, “¡pero esto fue en los viejos tiempos! Hoy en día hay pantalones de mujer, que son distintos a los de hombre”. Bueno, Dios no nos pide nada si no es para nuestro bien, pero veamos por qué esta petición del Señor:

1 – Los pantalones realzan el cuerpo de la mujer, así como sus formas.

Hoy en día, la promiscuidad está aumentando y la tasa de adulterio entre el pueblo de Dios aumenta cada día. Pero, ¿cómo contenerlo en la iglesia? En Mateo 5: 27,28 el Señor Jesús dice: “Oísteis que se dijo: ‘No cometerás adulterio. Pero yo les digo que cualquiera que mire a una mujer con intención impura en su corazón, ya cometió adulterio con ella». Pero luego piensas. «Ah, pero entonces no es mi culpa porque fue ese hombre quien me miró y no yo a él». ¡Gran error! En la palabra de Dios también dice en Mateo 18: 6 “Pero cualquiera que haga tropezar a uno de estos pequeños que creen en Mí, mejor le colgara una gran piedra de molino al cuello y se ahogare en las profundidades de el mar.» Es decir, si tu ropa hizo que esa persona pecara, eres tan culpable ante Dios como la persona que pecó en tu corazón. Entonces, ¡cuidemos de nuestra vestimenta queridas hermanas!

2 – Otro punto, y no menos importante, es el tema de la salud de la mujer.

El hombre tiene el órgano sexual externo, mientras que la mujer tiene el órgano genital interno, que es mucho más sensible que el masculino. Por lo tanto, su ropa debe ser de tal manera que el órgano femenino pueda «respirar», para que no esté sujeto a enfermedades como hongos y bacterias. De ahí que la falda responda a esta necesidad femenina, haciendo que esta parte tan sensible de la mujer esté protegida pero no “apretada”.

Y por último, me gustaría tratar un poco del largo de la falda de la mujer. Un día escuché a un pastor decir que estaba avergonzado en el púlpito cuando las faldas de las hermanas eran tan cortas que desde donde él estaba podía ver fácilmente su ropa interior. Tenía que seguir mirando hacia otro lado y eso había sido vergonzoso. Cuidemos el largo de nuestras faldas. Pueden terminar haciéndonos daño en lugar de dar un buen testimonio. La falda tiene que estar por debajo de la rodilla, para que tanto si nos sentamos como si nos arrodillamos no se levante hasta el punto de mostrar algo inapropiado. Esta es una forma de protegernos de situaciones desagradables. Y recuerde que Dios es un Dios de amor y solo nos da estas pautas para nuestro bien.

Con cariño de tu hermana en Cristo Jesús,

Paula H. Alvares de Carvalho.